No se requiere un plan de entrenamiento específico para poder realizar el Camino. El Camino de Santiago es una experiencia integral que acoge a personas de todos los niveles de aptitud física. Al final del día, el desafío físico del Camino es llegar a Santiago de Compostela. Algunas personas tardan más que otras y cada uno llega a su tiempo.
El entrenamiento que se puede realizar también depende de la etapa del Camino que se planea recorrer. Por ejemplo, necesitarás más práctica para cruzar los Pirineos que la Meseta (una zona relativamente plana en medio del Camino Francés). Cualquier preparación antes de la fecha de salida será muy beneficiosa para ti durante el viaje y también reducirá las posibilidades de lesiones. Añadir un poco de entrenamiento de resistencia y estabilidad también ayudará a mantenerte estable.
Una cosa importante que tendrás que considerar para caminar el Camino es tu calzado. Puedes usar zapatos o botas de senderismo dependiendo de tus preferencias personales. Recomendamos utilizar zapatos de senderismo más ligeros o incluso zapatillas de deporte en el peregrinaje del Camino, ya que son ligeros, duraderos y discretos. Puedes leer más sobre cómo elegir el mejor zapato para ti aquí.
La mejor manera de empezar tu entrenamiento es empezar a caminar más y seguir desde ahí. Un buen momento para comenzar el programa sería unos 3 meses antes de las vacaciones de caminata.
Aquí hay una versión en PDF del Plan de entrenamiento de Camino que puedes usar para empezar. Este plan fue diseñado por expertos fisioterapeutas de ReBalance Physiotherapy en Dublín.